Durante una audiencia el jueves 29 de junio, Macías entró en crisis y tuvo una internación. La causa que investiga los presuntos maltratos y abusos sexuales de Juan Antonio «Cacho» Garay contra su ex pareja, Verónica Macías Bracamonte, se vio sacudida por una nueva controversia. Cambios importantes en la situación de Astudillo.
Con la internación de Macías y después de la polémica generada por el apartamiento del fiscal de Violencia de Género, Daniel Carniello, reemplazado por Mónica Fernández Poblet, el caso sumó más tensiones con la última declaración de la denunciante en el Polo Judicial.
Según fuentes consultadas, Macías fue citada para ampliar su testimonio en la Unidad Fiscal de Violencia de Género, en el edificio del Ministerio Público Fiscal.
A pesar de las recomendaciones de evitar hombres en su entorno debido a su fobia hacia ellos, la denunciante se encontró rodeada por los abogados querellantes y los defensores de Garay y Sandra Astudillo Staffolani, la ex empleada de la Legislatura provincial implicada en los supuestos abusos y amenazas contra la bailarina.
Un error inexplicable
Después de dos horas y diez minutos de declaración, los funcionarios judiciales descubrieron que la transcripción del testimonio se había borrado por un error inexplicable.
Este incidente desencadenó una crisis en Macías, quien salió corriendo del despacho y se refugió debajo de un escritorio, sorprendiendo a todos los presentes.
Ante esta situación, Fernández Poblet solicitó asistencia médica y la denunciante fue trasladada al Hospital Lagomaggiore, donde recibió atención adecuada y permaneció varias horas en internación antes de recibir el alta médica.
Este no es el primer episodio de crisis que Macías ha experimentado en el edificio judicial, ya que en junio se desmayó durante una entrevista con la prensa después de declarar.
Nueva situación para Astudillo
Las declaraciones de Macías complicaron la situación de los imputados y llevaron a la fiscal a revocar el beneficio de detención domiciliaria de Astudillo, quien fue trasladada a un penal de mujeres de la provincia.
Garay aguarda medidas para el miércoles
En el caso de Garay, su situación no ha cambiado y continúa cumpliendo la prisión preventiva en casa de su hermana. Sin embargo, según detalló Diario El Sol, el juez Federico Martínez, del Juzgado Penal Colegiado Nº 1, deberá decidir este miércoles sobre el pedido de revocación de la detención domiciliaria, presentado por la querella de Macías y respaldado recientemente por la Fiscalía, en una audiencia que se llevará a cabo en la Sala 21D del Polo Judicial a las 8:30 a.m.
Garay enfrenta cargos por amenazas, coacciones, robo, tenencia ilegal de armas, abuso sexual y privación ilegítima de la libertad, todo en el contexto de violencia de género. Por su parte, Astudillo está acusada de abuso sexual doblemente agravado y con el uso de armas.
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