El Juez Federal Walter Bento finalmente quedó detenido tras Veredicto del Consejo de la Magistratura y fue trasladado al penal de Cacheuta en Luján de Cuyo.
En una jornada que marcó el final de un proceso, el juez federal de Mendoza, Walter Bento, fue destituido por el jurado del Consejo de la Magistratura. La decisión, fundamentada en un «mal desempeño» de sus funciones, llevó a la inmediata pérdida de la inmunidad de arresto.
Posteriormente, Bento fue detenido en Mendoza como parte del juicio penal que investiga delitos graves relacionados con su actuación como juez.
La Justicia mendocina había detectado un incremento patrimonial del grupo familiar del juez, además de viajes al exterior, compra de propiedades y vehículos que estiman podrían provenir del cobro de coimas a detenidos.
Durante el juicio, el jurado consideró de manera mayoritaria que el mal desempeño de Bento estaba «acreditado de forma concluyente» durante el debate oral y público. Este mal desempeño, según el jurado, se manifestó en «maniobras» destinadas a entorpecer la investigación penal.
Adicionalmente, Bento enfrenta un juicio penal en Mendoza por cargos que incluyen asociación ilícita, cohecho pasivo, omisión y retardo de justicia, enriquecimiento ilícito, lavado de activos, prevaricato y falsedad ideológica.
El jurado, compuesto por legisladores y funcionarios judiciales, también tuvo en cuenta la venta de un inmueble por parte del exmagistrado, donde omitió declarar su calidad de persona políticamente expuesta y obtuvo un crédito hipotecario con información falsa.
La detención de Bento, que no puede ser apelada, podría conllevar la aplicación de prisión preventiva si los jueces mendocinos consideran que existe riesgo de fuga o entorpecimiento del juicio penal en curso.
Bento, escoltado por dos policías federales, escuchó la sentencia en los tribunales federales de Mendoza y fue notificado sobre su detención al mediodía. Posteriormente, fue trasladado a la Unidad 32 y luego al penal federal en Cacheuta.
La decisión del Consejo de la Magistratura y su consecuente detención marcan un capítulo importante en la compleja situación judicial del exjuez.
El jurado
El jurado, designado por sorteo, estuvo integrado por los senadores Daniel Bensusán (Frente Nacional y Popular) y José Torello (PRO); las diputadas Anahí Costa (Frente de Todos) y Ana Clara Romero (PRO); los camaristas Javier de la Fuente y Javier Leal de Ibarra y el abogado Alfredo Barrau.
El magistrado federal quedó destituido por seis de los siete jurados, ya que el camarista De la Fuente se opuso a la destitución con un voto de minoría que consideró que «la causal de mal desempeño atribuida en realidad se ha basado en la comisión de hechos delictivos que no han sido probados».
Las audiencias del juicio en el Consejo finalizaron a principios del mes pasado, con los alegatos de las partes y las palabras finales del mismo magistrado que dijo ser inocente de todos los cargos y solicitó al jurado que aguarde el resultado del juicio penal para decidir sobre su caso, un pedido que parece haber atendido De la Fuente con su voto.
Bento escuchó la sentencia en los tribunales federales de Mendoza, ubicados sobre las calles España y Pedro Molina, escoltado por dos policías federales, desde el mediodía hasta las 13.30h del miércoles, luego fue notificado por el Tribunal Oral Federal 2 sobre la decisión de detenerlo.
Walter Bento: su camino
Bento tiene 56 años y una carrera como juez federal electoral que corrió en paralelo con el kirchnerismo. Quien avaló su postulación fue Juan Carlos “Chueco” Mazzón, operador del peronismo histórico durante décadas. Bento tuvo siempre una relación cercana con la jueza María Romilda Servini, que, como lo era él, es jueza federal con competencia electoral.
En 2011, tuvo su actuación más rutilante cuando en plena guerra del kirchnerismo contra Clarín, extendió su competencia mas allá de Mendoza para ordenar un allanamiento con la Gendarmería Nacional en Cablevisión.
A pedido del grupo Vila-Manzano, decidió la intervención de Cablevisión en favor de Supercanal. La Corte determinó la nulidad de las actuaciones y cuestionó el accionar de Bento. El juez fue denunciado, pero en 2012 el pedido de juicio político fue desestimado con el auxilio del kirchnerismo en el Consejo de la Magistratura.
Antes de asumir en el juzgado federal N°1 de Mendoza, Bento trabajó en una casa de cambios en Buenos Aires. Durante un viaje a Chile conoció a su esposa, Marta Isabel Boiza, hoy investigada junto a él. En 1992, el matrimonio decidió radicarse en Mendoza y, a partir de ese momento, comenzó la carrera judicial de Bento. Su vida cambió en 2005, cuando se hizo cargo del juzgo federal electoral mendocino.
Con información de Telam y La Nación.
