El adiestrador de perros Marcos Herrero recibió el procesamiento del Juzgado Federal N°1 de Bahía Blanca que dictó por falso testimonio agravado, esta vez en el caso de desaparición seguida de muerte de Facundo Astudillo Castro en el 2020.
El fallo del juez Walter López se dio hace dos semanas y se conoció este jueves. La denuncia en su contra fue radicada por el abogado Sebastián Martínez, encargado de la defensa de los cuatro policías que están sospechados de la desaparición forzosa del joven Facundo Astudillo Castro, el día 30 de abril de 2020 en la Ruta Nacional N°3.
Marcos Herrero, instructor canino, acusado de plantar pruebas en la investigación, fue procesado por siete hechos de falso testimonio. El fallo se basó en pruebas que desacreditaron sus hallazgos, incluyendo la declaración de un perito en odorología forense.
Aunque el procesamiento no afecta la investigación principal, la querella sospecha que se busca beneficiar a los policías implicados. Facundo desapareció en abril de 2020 y sus restos fueron encontrados en agosto del mismo año.
Se investiga la posible participación de agentes policiales en su desaparición forzada. Los hallazgos de Herrero se descartaron debido a la falta de conexión temporal y científica. La Justicia consideró falsos los supuestos rastros que encontró el instructor con su perro «Yatel».
Expertos coinciden en que los canes entrenados solo pueden detectar olores o células humanas hasta 36-72 horas posteriores. Las pruebas de otros adiestradores no arrojaron resultados relevantes.
El juez concluyó que Herrero intentó perjudicar a los policías y fundamentó su procesamiento en la evidencia recolectada.
Facundo Astudillo Castro
El joven de 22 años fue visto por última vez el 30 de abril de 2020, en la etapa más dura de la cuarentena, cuando salió de su casa de la ciudad bonaerense de Pedro Luro rumbo a Bahía Blanca para ver a su novia.
En el trayecto fue interceptado por la Policía bonaerense por violar el aislamiento social, preventivo y obligatorio. A pesar de la búsqueda, nada se supo de él hasta el 15 de agosto de ese mismo año, cuando fueron hallados sus restos en un cangrejal de la localidad de General Cerri. Posteriormente la autopsia realizada por expertos del Equipo Argentino de Antropología Forense (EAAF) estableció que el joven murió a causa de una “asfixia por sumersión”.
La denuncia por falso testimonio agravado fue impulsada por el abogado Sebastián Martínez, encargado de la defensa de los cuatro policías bonaerenses inculpados en el proceso.
Por otro lado, Herrero ya cuenta con una sentencia del Tribunal Penal Colegiado 2 de Mendoza que lo encontró culpable por “plantar” una prueba que el instructor canino vinculó a la desaparición de Viviana Luna en Potrerillos, Luján de Cuyo, caso que se investigaba entonces. Ese fallo fue impugnado y ahora está bajo revisión de la Cámara Federal Penal de Casación.
