Militantes del Partido Socialista junto a Martín Becerra presentaron en la UNCuyo el proyecto de ley de comunicaciones convergentes. Se busca con esta iniciativa la regulación de los medios audiovisuales, junto a las telecomunicaciones y los servicios de internet.
Martín Becerra es un renombrado estudioso de la comunicación en la Argentina. Ha desarrollado diferentes investigaciones y proyectos en el marco de las políticas de comunicación. Sostiene que hace algunos años era muy difícil pensar en un proyecto que involucrara a los medios de comunicación y los servicios de telecomunicaciones. Sin embargo “se entiende que hay condiciones tecnológicas hoy por hoy que acercan el funcionamiento de estos servicios”.
Es por eso que, según explican los autores del proyecto, los Estados deben generar políticas públicas inclusivas y democráticas que preserven la diversidad cultural, la diversidad de expresiones, de puntos de vida y de perspectivas e ideas. Que garantice al mismo tiempo la expresión federal y de los sectores sin fines de lucro, para que no solo sea una actividad lucrativa. Para que un segmento de estas actividades sea comercial, desde luego; pero que la política pública pueda garantizar que el segmento no lucrativo tenga su espacio.
“Planteamos que tiene que haber un fondeo y un sistema de financiamiento, que en el proyecto proponemos de producciones federales, es decir de aliento a la producción de contenido fuera de Buenos Aires” asegura Becerra.
Las transformaciones constantes en el ámbito de las comunicaciones
Al tratarse de un segmento en constante transformación, y cada vez a mayor velocidad de desarrollo, genera una dificultad para la regulación del mismo. “Eso es uno de los desafíos que tiene cualquier regulación sobre este campo” puntualiza Becerra. Y explica que “el proyecto estipula que periódicamente hay que revisar las condiciones dispuestas en la letra del mismo, porque debido a las transformaciones hay algunas cosas que quedan obsoletas o que requieren la ocupación en el espectro radioeléctrico el desplazamiento de un servicio por la aparición de otro”.
“Tiene que haber una actualización permanente y lo que nosotros decimos en el proyecto es que esa actualización tiene que demandar mayorías especiales” sostiene el investigador y docente. “O sea que eso no lo puede hacer al tun tun el gobierno de turno, porque esto son cuestiones de tipo tecnológicas, pero son eminentemente políticas y tienen un impacto en la distribución de acceso de la ciudadanía a estos servicios” aseguró.
La concentración económica
Tras la venta de C5N por parte del Grupo Indalo, Becerra analizó que se está reconfigurando “con una venia explícita por parte del gobierno de Mauricio Macri”. Y entiende que “vamos hacia una tendencia mucho mayor en la concentración respecto a lo que ya veníamos teniendo, que no era poco”.
Esta concentración, explica el docente, no sólo se explicita en la venta de los medios de Cristóbal López, sino también “en el anuncio de fusión entre Cablevisión y Telecom o también el permiso que le daría el gobierno nacional a las telefónicas para que operen nuevas actividades como la TV satelital”.
Es en este sentido que Becerra sostiene que “tenemos un gobierno que abraza la idea de que los actores industriales más concentrados que protagonizan estas actividades son los únicos que tienen derechos en los que el Estado formula y adecua su regulación para que estos grupos continúen expandiéndose”. Y, de esa forma, puntualiza que “eso no solamente limita el derecho ciudadano a la libre expresión porque reduce la cantidad de perspectivas y de voces en el ruedo de la comunicación masiva, sino que además limita también la competencia”.
Finalmente, el estudioso de la comunicación aseguró que “muchos operadores y empresas tipo Pyme de escala mediana, con el tipo de fusiones y concentraciones que se están generando tienen un horizonte muy limitado de funcionamiento”. Y apuntó que “s casi una invitación coercitiva a que o venden o venden”.