Debido a sus propiedades reconfortantes y a su capacidad para aliviar síntomas de resfriados y dolores de garganta, la miel es un aliado en el invierno. Conocé las 5 claves para reconocerla.

El consumo de miel pura es una opción saludable y nutritiva. Durante esta época, su ingesta es especialmente beneficiosa para fortalecer el sistema inmunológico y aliviar la tos. Descubrí las 5 claves para un consumo saludable.
Se trata de un producto natural beneficioso debido a su alto contenido en minerales, vitaminas y oligoelementos. El problema es que a veces sin darnos cuenta terminamos comprando miel adulterada. Vale recordar que no se debe administrar miel a los menores de un año.
Aquí te compartimos 5 claves para identificar la pura y descubrir las alteradas.
Compra en lugares confiables
Adquirí siempre en lugares de confianza como directamente al apicultor, en dietéticas o mercados de economía social. Evita la compra callejera, donde se suelen ofrecer precios bajos que pueden indicar adulteración.
Diferenciá entre miel y productos a base de miel
Leé las etiquetas de los productos para asegurarte de que estás comprando pura y no un alimento que contenga mezclada con otros ingredientes, como jarabe de maíz de alta fructosa. Estos productos suelen ser líquidos y se encuentran en supermercados, mientras que la pura cristaliza con el tiempo y tiende a ser más sólida.
Observa la cristalización
Cuando es pura cristaliza, azucara o se endurece con el tiempo. Este proceso es natural y no afecta su calidad. Desconfiá de las mieles líquidas que nunca cristalizan, ya que podrían ser adulteradas.

Variedad y origen floral
Las mieles claras suelen provenir de zonas áridas, mientras que las oscuras proceden de zonas salitrosas. La de color más oscura tiende a tener mayor presencia de minerales y vitaminas B y C. Algunos productores ofrecen una variedad de mieles desde claras hasta oscuras.
Evita calentarla
La miel no debe calentarse, ya que pierde propiedades al entibiarse. Incluso debe incorporarse a un té con temperatura tibia. Se recomienda batirla para romper los cristales de azúcar y obtener una textura cremosa.