La comunidad de padres de la escuela Carlos Negri de Potrerillos se agotaron al no tener respuestas ante las carencias que hay en el establecimiento.
Los niños de Potrerillos no empezaron las clases, por causas de infraestructura en el establecimiento educativo, que comprometió al nivel inicial, primario, secundario y terciario.
La comunidad de padres y madres, se autoconvocaron el viernes pasado para pedir que se realice el mantenimiento, de cloacas, vanitoris, inodoros, junto a las cañerías de gas y agua. «Potrerillos puede convertirse en un foco de enfermedades ya sea Corona virus por ser un pueblo fronterizo y de turismo (hotel /estación de servicio y comercios) o contagio de enfermedades básicas ligadas a la higiene . Por favor ayúdenos a cuidar a nuestros niños», pidió uno de los padres.
«No hubo previsión, consideran que hubo una total falta de responsabilidad, incumplimiento y negligencia por parte de la empresa contratada por la DGE para realizar los trabajos necesarios», expresó el concejal Rubén Lázaro, quien se acercó a escuchar a los vecinos.
Ésta situación impidió iniciar las clases en condiciones dignas para los alumnos, entre las que se destaca que los bebederos no funcionan, así como las descargas de los sanitarios. Las cloacas despiden mal olor y la conexión del calefón está mal hecha, según indican los padres.
Entre las necesidades, piden cambiar los vidrios rotos, limpiar el tanque de agua y repara la pérdida en el tanque principal de reserva, que genera un deterioro en la pared colindante por la humedad, produciendo agrietamiento en el muro al ceder el terreno.
El concejal Lázaro solicitó al Director General de Escuelas, Lic. José Thomas, con el expediente EX2020-01508462, que tome las medidas correspondientes a la empresa a cargo de las reparaciones ante la ineficiencia demostrada, evaluando no otorgar más obras a la misma. Además solicitó aplicar sanciones a los supervisores de los trabajos por negligencia e incumplimiento.
El concejal también enfatizó que en vez de pagar a empresas que deben realizar viajes a la zona de montaña, que se contrate mano de obra local, que redituará en un beneficio económico para la comunidad y reducción de gastos del erario público. Además de generar un mayor compromiso con la tarea y orgullo para sus hijos.