«Ante la frialdad de los algoritmos, las personas buscan nuevas modalidades para conocer potenciales parejas. ¿Qué sucede con las aplicaciones de citas?
Conocer personas y formar pareja es un desafío en el que los algoritmos parecen no dar la respuesta en un mometo de baja en las descargas de las aplicaciones de citas.
Algunas de las apps de citas más populares en Argentina son: Tinder, Badoo, happn, Kismia, Bumble.
En el caso de Tinder, la aplicación de citas más elegida, ha visto una disminución en sus descargas y en el número de usuarios en el último año.
En el caso de Bumble, otra de las aplicaciones de citas más frecuentadas, también ha experimentado una caída en su crecimiento.
Esta baja en la tendencia es causada por factores como la desaceleración del crecimiento tras la pandemia, la falta de renovación en las funciones y el desgaste emocional de los usuarios.
Además, los usuarios han experimentado un desencanto debido a la experiencia frívola que genera el uso de las aplicaciones de citas.
Tal como explica el tecnólogo Santiago Bilinkis, el algoritmo de esas aplicaciones ofrecen puntuación según el grado de belleza o fealdad, el contexto de las fotos de la persona y el tiempo de observación del perfil según los usuarios.
Mientras que a la par, aparece otro fenómeno, el de la hipercomunicación y la sobreexposición de la intimidad hacen que desaparezca la curiosidad por el otro.
En tanto que todo conduce a una reducción de la calidad de los vínculos al momento de conocer a alguien, ya que, según sostiene Bilinkis, el objetivo último de las aplicaciones de citas, es que no consigas pareja.
La cruda verdad del algoritmo no es más que una falsa ilusión, donde la salida es volver a concectar con las personas en experiencias cara a cara.
Sin embargo, en este punto también aparece otro escollo, al intentar saltar los círculos habituales para conocer otras personas.