El abogado defensor de los jóvenes y hombre vinculado al rugby dijo sobre los imputados que no fue un ataque en manada, sino que se trató de un tumulto.
Los cuatro jóvenes imputados son Lucas Garrido (18), el único al que la Justicia le atribuyó lesiones graves y amenazas; Martín Bordignon (18), Juan Muñoz (20) y Luca Biglieri (18). Todos están bajo proceso por amenazas tras el hecho de violencia ocurrido el domingo 17 de octubre en la madrugada durante un cumpleaños de 15 celebrado en el Liceo Rugby Club, dejando a un menor de 16 años hospitalizado con 8 fracturas de maxilar y riesgo de pérdida de la sensibilidad en parte de su cara.
Marcelo Biglieri, abogado defensor de tres de los cuatro rugbiers imputados, entre ellos un sobrino, también es dirigente del rugby mendocino y expresó a Diario Uno que «No hubo ataque en manada; tampoco intento de homicidio ni cacería. Sí hubo un tumulto y un golpe que desató una reacción; también lesiones que de ninguna manera vamos a justificar. Todo lo contrario. Por eso nuestro respeto para la víctima y su familia. Pero hay que dejar las cosas claras«.
El caso está a cargo de la fiscal Claudia Ríos, de quien Biglieri destaca «la rapidez y precisión con que trabajó desde el comienzo. El episodio ocurrió el domingo y el miércoles la fiscal ya tenía todo claro, descartando muchas versiones malintencionadas e incluso audios que eran falsos».
El penalista Biglieri es, además, tío del imputado Luca Biglieri. Fue presidente del Liceo Rugby Club, que repudió el episodio, y de la Unión Argentina de Rugby; también formador de generaciones de deportistas.
«Tampoco hubo paliza ni patadas ni como se dijo. Se descartó todo eso. Las lesiones que sufrió la víctima fueron producto de un solo golpe que todos los testigos, incluso los que aportó la víctima lo aseguran. Ese único golpe fue dado por un chico de estatura mediana y contextura física», dijo el defensor en referencia a Garrido, que tiene 18 años y mide 1,68 y pesa 69 kilos. El abogado dijo que el joven «No tiene una contextura como para haber causado tanto daño como el que tenía la víctima».
Por otro lado, Ríos imputó a Juan Martín Muñoz, de 20 años, Martín Bordignon, de 18 años, y a Luca Biglieri, de 18 años, por amenazas debido a que después de la golpiza, estos habrían salido en un auto a perseguir a los amigos de la víctima que regresaban a su casa, y hasta habrían intentado subir a uno de ellos a la fuerza al vehículo.
Para estos tres acusados, la fianza que impuso la fiscal es de $250 mil. En los cuatro casos, tienen cinco días hábiles para rendir ese dinero, de lo contrario, quien no cumpla, podría quedar detenido.
Además de la fianza, los imputados deberán fijar un domicilio real donde vivan, y en caso de mudarse, notificar cuál es la nueva dirección. Tampoco pueden hacer viajes que impliquen salir del país, debido a que están sujetos a proceso.
No pueden acercarse de ninguna manera ni por ningún medio a los menores de edad que fueron víctimas. Es decir, al chico de 16 años que fue golpeado ni a sus amigos que fueron amenazados ya fuera de la fiesta.
Esto implica que tampoco pueden contactarse con ellos por ninguna red social, ya sea Facebook, Instagram, Telegram ni WhatsApp.
Fuente: Diario Uno
