La hija de 18 años de Viviana Luna contó el difícil momento que atraviesan y le suplicó a la Justicia que continúe la búsqueda.
El dolor y las ganas de saber dónde está Viviana Luna, de quien no se sabe nada de su paradero desde diciembre de 2016, siguen intactos en la familia de la desaparecida. Así lo explicó la hija menor de la mujer, Ayelén Julián, de 18 años, a través de una carta difundida a los medios de comunicación.
La adolescente, quien nunca había sido entrevistada ni hablado debido a que era menor de edad al momento de la búsqueda de paradero de su madre, optó por romper el silencio y detallar por escrito el deseo de saber qué pasó con su madre, y pedirle a la Justicia mendocina que no se olvide de esta mujer, que fue vista por última vez en Potrerillos, Luján de Cuyo, tras salir de una entrevista laboral.
Carta textual del pedido de ayuda de Ayelén Julián para que continúe la búsqueda de Viviana Luna:
Soy Ayelén Julián, la hija más chica de Viviana Luna, la mujer que desapareció en Potrerillos el 7 de diciembre de 2016. Lamentablemente otra vez estoy a través de los medios de comunicación trasmitiendo mi dolor y mi desesperación por no tener a mi mamá hace dos años, por no saber dónde está, o si está. Ya todos sabemos que la tierra no traga personas, que hay un responsable atrás de este caso. Dos años han pasado sin mi mamá, quién sabe el dolor que mis hermanos y yo llevamos dentro…
Hace dos años vengo tratando de que se haga justicia y busquen como se tiene que buscar, que los encargados de buscarla y encontrarla no hagan la vista gorda y miren para otro lado. Tendré sólo 18 años pero creo que para pedir justicia, porque tú mamá está desaparecida, no hay edad. Dos años han pasado llenos de dolor, angustia, impotencia, de esperarla todos los días y sentir cómo poco a poco se te va rompiendo el alma.
Mi mamá no es así, no era una persona que se fuera por días y no avisara. Por eso es que queremos saber qué fue lo que pasó con ella. Si tienen que buscar en los mismos lugares que buscaron antes y no encontraron nada, que lo vuelvan a hacer hasta que encuentren algo; lo que sea. Nadie sabe el dolor que sentimos, es inexplicable, inaguantable llevar este peso. Hoy digo BASTA DE PREGUNTAS SIN RESPUESTAS. BASTA DE MUJERES DESAPARECIDAS.
#NiUnaMenos #QueremosJusticia #QueremosSaberLaVerdad #JusticiaPorVivianaLuna
Ayelén Julián Luna.
El caso Viviana Luna
El 7 de diciembre de 2016, la mujer, que tenía 45 años al momento de su desaparición, fue a una entrevista laboral para ocupar la vacante de servicio de limpieza en un complejo de cabañas, ubicado en Avenida El Sol, de Las Vegas. Allí, contó al dueño del complejo que estaba pasando por una situación emocional complicada y que precisaba con urgencia el puesto de trabajo, ya que se encontraba viviendo con uno de sus cuatro hijos como resultado de su mala situación económica.
Nada de lo que contó Luna valió para adquirir el trabajo y esa misma mañana fue rechazada por el entrevistador. Luego de recibir la noticia, la mujer salió del establecimiento, se dirigió a un quiosco donde compró una botella de agua, y desapareció.
La ex fiscal de Delitos Especiales Claudia Ríos (hoy en Homicidios), inició un operativo de búsqueda en el lugar y zonas aledañas, del que sólo hallaron cartas archivadas con documentos ocultos en la computadora de la lujanina. Las mismas estaban dirigidas a sus hijos y hablaban de la complicada situación a la que le estaba haciendo frente, sin mencionar que atentaría contra su vida.
Esas fueron las únicas pistas que recogieron los investigadores a dos años de la desaparición de Luna, motivo que llevó a los familiares y amigos a movilizarse por las calles mendocinas en reclamo datos certeros.
Fuente: MendoVoz
